'La que se avecina' tocó techo en cuanto a seguimiento hace ya unos años. Es inevitable que el interés del público se acaba erosionando, pero eso no quita que siga siendo una serie con millones de seguidores, algo que quizá no se note demasiado durante su emisión en abierto en Telecinco, pero es que hace ya un tiempo que los nuevos episodios se estrenan primero en Amazon Prime Video.
De hecho, sus audiencias en la cadena de Mediaset se resintieron cuando ese histórico acuerdo entró en funcionamiento y ahora a duras penas supera los 1,5 millones de espectadores cuando en su época de mayor esplendor promediaba más de 4 por episodio. También es cierto que la gente ve menos televisión que antes, por lo que quizá ya no exista la necesidad de temporadas tan largas, pues la número 13 llegó a su final en Prime Video este pasado viernes con el estreno de su octavo episodio.
Como recordaréis, no quedé demasiado satisfecho con el inicio de esta temporada 13, ya que era la ocasión de hacer una auténtica revolución en la vida de los antiguos vecinos de Mirador de Montepinar con la llegada de muchos nuevos personajes como consecuencia de su mudanza a Contubernio 49. No puedo decir que la mejor haya sido sustancial en los capítulos posteriores, pero al menos sí que se han ido sentando algunas bases para que la diversión vaya a más.
Cuidado con los spoilers a partir de aquí.
Por lo pronto, la marcha temporada de Miren Ibarguren tras unos pocos episodios le ha sentado bien a 'La que se avecina', ya que esa trama con toques de gordofobia además de no venir a cuento tenía poquísima gracia, pues acaba siendo volver una y otra vez sobre lo mismo. Eso también ha permitido que Loles León y Petra Martínez tengan más escenas juntas y la líen a la mínima ocasión. Ese cambio sí ha supuesto una mejora tremenda para la serie, tanto por su capacidad para ir metiendo cizaña como para que los vínculos con los nuevos personajes crezcan, incluso aunque no sea por buenos motivos.
Por lo demás, la travesía por el desierto del personaje de Jordi Sánchez ha tenido sus momentos, como ese simpático reencuentro con Parrales, siendo además un acierto que el final de temporada no opte por un regreso por todo lo alto y deje claro que el futuro de Mariscos Recio no va a ser precisamente sencillo. Es verdad que eso ha sido consecuencia de que la trama sobre la maternidad de Adolfo Faustino haya acabado siendo poco más que un pegote con tintes de culebrón y muy poca gracia, pero bueno, si hay que dar un paso en falso antes de enderezar el rumbo, yo estoy dispuesto a pasarlo por alto.
Por lo demás, la mayoría de nuevos personajes se han sentido más como complementos que como creaciones con algo que aportar. Pienso por ejemplo en Alonso (Álex Gadea), que básicamente por un lado ha tenido que lidiar con la peculiar personalidad de Amador (Pablo Chiapella) y por otro con la rivalidad de Maite (Eva Isanta) con su ex, pero también en Óscar (Félix Gómez) dando una excesiva cantidad de oportunidades a su amistad con Amador.
La gran excepción la tenemos en el 1 Izquierda, pues inicialmente parecía que todo podía quedar limitado a la Marquesa interpretada por Mamen García aparentando una cosa pero siendo en realidad otra, con su criada haciendo lo posible por salir del paso. Eso sí ha sido una constante, pero los guionistas han sabido sacarle más provecho, como en el episodio en el que ella tiene que salir a la compra o las semillas que ha ido desarrollando para esa enemistad con Recio que está llamada a darnos muchas alegrías en el futuro.
Más allá de eso, el nuevo edificio ha sido un acierto, en parte por la rivalidad entre interiores y exteriores que ha llevado finalmente a la renuncia de Greta como presidenta de la comunidad. Espero que eso sirva también para impulsar al personaje de Laura Gómez-Lacueva, pues tenía muchas esperanzas depositadas en ella y la faceta más estirada de Greta no termina de hacer justicia a la vis cómica que mostró en 'Historias lamentables' o en 'El Pueblo'.
En resumidas cuentas
Con todo, la temporada 13 se ha quedado a medias en el mejor de los casos, confirmando que 'El Pueblo' es bastante mejor serie. Es verdad que de esta última solo hemos visto tres entregas, pero era ahora cuando tocaba que 'La que se avecina' recuperase frescura y solamente lo ha hecho a cuentagotas. Al menos ha acabado mejor de lo que empezó y ha provocado ciertas cambios en las dinámicas que invitan a ser optimistas sobre la temporada 14. Algo es algo.
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La noticia 'La que se avecina': el impactante final de la decepcionante temporada 13 invita a ser optimistas sobre el futuro de la serie de Telecinco en Amazon Prime Video fue publicada originalmente en Espinof por Mikel Zorrilla .
Javier Fernandez
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